Durante el mes de Mayo, son muchos los eventos que acontecen en todo el mundo: el día de la Madre, el día Internacional de los Trabajadores, el Día Mundial de la Libertad de Prensa y los domingos de comuniones. Padres, madres, niños y familiares se preparan para el gran día en el que se espera que no falte ni el más mínimo detalle. Aunque a veces, no ocurre así.

Es muy común que las mamás acudan a consulta podológica para una puesta a punto de sus pies, con el fin de poder calzarse unos buenos tacones. Lo curioso es que no se prepara al verdadero/a protagonista para el estreno de sus zapatos de comunión.

Por lo que hemos observado en los escaparates a lo largo de los últimos meses, el calzado de comunión cumple con los requisitos de un buen zapato: piel de calidad, sujección adecuada y horma recta. El problema surge cuando el niño se calza el zapato el día de su comunión y aparecen las inesperadas rozaduras y ampollas que le «amargan» un tanto la celebración. ¿Podríamos haberlo evitado?, por supuesto. Es tan simple como seguir unos sencillos consejos con el fin de acomodar el zapato al pie y no al contrario, como ocurre habitualmente.

Lo más importante es no estrenar el zapato el mismo día, siempre recomendamos utilizarlos en casa durante cortos períodos de tiempo previos a la celebración. Además, es aconsejable utilizar el mismo tipo de calcetín o media para que el pie manifieste cualquier incomodidad lo antes posible. Si a ello le añadimos un correcto corte de las uñas y la aplicación de una crema hidratante o anti-rozaduras, evitaremos pasar un mal rato.

Aun así, si en los días previos a la celebración, observamos que la adaptación del zapato al pie del niño no es satisfactoria, es recomendable el consejo podológico. El podólogo valorará el calzado y el pie en conjunto y pautará las modificaciones convenientes para adaptar el zapato.

 Cristina Martínez Boix. Podóloga.


Indudablemente, las modas nos afectan a todos. Y ahora le toca a la bicicleta. Son muchas las ciudades como Barcelona, Valencia o Elche que, desde hace tiempo, facilitan  el uso de bicicletas públicas como medio de transporte para el ciudadano.  Hace unas semanas, en nuestra ciudad se amplió la red de estaciones del llamado BiciElx, mejorando el servicio. Además, el aumento en el precio del combustible, ha llevado a la población a la búsqueda de medios de transporte más económicos y a la vez, ecológicos y saludables.

A través de nuestra propia experiencia, hemos comprobado que Elche es una ciudad cómoda para el uso de la bicicleta como medio de transporte. Además de desplazarnos, hacemos ejercicio. La conducción se convierte en algo más placentero y menos estresante y agudizamos sentidos a veces dormidos, por la costumbre al conducir el coche.

Os recomendamos el uso de la bicicleta tanto para el trabajo como para el ocio. Podemos descubrir rincones que jamás se nos ocurrió visitar en nuestra ciudad, tener una perspectiva diferente de aquello que vemos a diario y ¿por qué no?, hacer una parada en cualquiera de los restaurantes que abundan en la ciudad, sin el estrés que conlleva el uso del coche. Ahora es un buen momento, después de estas mini-vacaciones de Semana Santa, con el fin de evitar el «Síndrome Post-vacacional». O el próximo fin de semana,  con un poco de turismo por el recién reformado Paseo de la Estación (muy recomendable, por cierto) y una buena comida en la zona del Palacio de Congresos, eso sí, moviéndonos en bicicleta. ¿No os parece una opción muy saludable? Ejercicio, turismo y gastronomía.

Cristina Martínez Boix. Podóloga.